Focaccia
Este manjar tradicional de la cocina italiana se consume como aperitivo.
Eso sí, es merecedor de la etiqueta de plato si potenciamos el toque mediterráneo añadiendo aceitunas o jamón.
Ingredientes
Masa
- 470 gramos de harina de fuerza
- 380 ml. de agua templada
- 10 gramos de levadura fresca (o 3 gramos de seca)
- 4 gramos de sal
- 10 gramos de AOVE
Aderezo
- 2 cucharadas de AOVE
- 2 cucharadas de agua
Elaboración
- Mezclar la levadura desmenuzada con el agua templada y batir con un tenedor hasta que se haya disuelto.
- Añadir la sal y el aceite, y mezclar unos segundos.
- Echar la harina tamizada e ir removiendo hasta que no queden grumos.
- Tapar la masa y dejar reposar 20 minutos.
- Humedecer las manos para que la masa no se pegue. Doblar la masa de fuera al centro, en cada uno de los cuatro lados. Dar la vuelta a la masa entera. Volver a tapar y dejar reposar de nuevo otros 20 minutos.
- Volver a doblar en forma de sobre (repetir paso anterior). Tapar y dejar reposar 20 minutos.
- Otra vez a doblar. La masa es más elástica y tiene más cuerpo. No pasa nada si la masa se mueve un poco. Saldrá bien.
- Coger un recipiente limpio, echar aceite y verte la masa en ella. Tapar y dejar reposar 24 horas en la nevera. Yo uso un tupper grande redondo con tapa. Es más sencillo y cómodo. No os asustéis si al cabo de las horas la masa está ”saliéndose” del tupper.
- Forrar la bandeja del horno con papel vegetal.
- Echar aceite y extender con un pincel de cocina. Este paso es importante y no escatimes (tampoco para bañar la masa). Este es el momento decisivo para que la base de la focaccia quede crujiente.
- Verter la masa, mojar las manos con aceite y estirar.
- Hacerlo con cuidado y no aplastar la masa (con la punta de los dedos es ideal). Si no se estira fácilmente, dejar en reposo 10-15 minutos para que se relaje.
- Estirar en toda la superficie de la bandeja.
- Encender el horno a 250ºC con calor solo abajo y calentar durante 2o minutos.
- Preparar en un vaso la mezcla de AOVE y agua y mezclar hasta que emulsionen.
- La focaccia se puede rellenar con los ingredientes que quieras, pero la clásica es romero y sal. Espolvorear por encima. Cuidado con la sal, que no se os vaya la mano. Yo ya he reducido la sal a la mitad de la receta original que encontré hace unos años y os aseguro que queda mucho mejor.
- Antes de meter al horno, rociar la emulsión de AOVE y agua. Este paso también es importante para que quede crujiente y jugosa.
- Bajar temperatura a 230ºC con calor arriba y abajo.
- Hornear 20-25 minutos.
Cortar con unas tijeras y disfrutar del maravilloso sonido del crujiente.
Fuente (Recetas con mucho Rock & Love).
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